MADRID 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Petróleo de Irak ha anunciado este jueves la firma de un acuerdo con la región kurda y las compañías petroleras para el inicio del bombeo y la entrega de todo el crudo producido en el Kurdistán iraquí --a excepción de una parte reservada para el consumo local-- a la Organización Estatal para la Comercialización del Petróleo (SOMO, por sus siglas en inglés), que lo exportará a través del oleoducto turco-iraquí y el puerto turco de Ceyhan.
Bagdad ha subrayado que el acuerdo deriva de "una visión nacional compartida destinada a fortalecer el papel de Irak como actor clave en el mercado energético mundial, preservar la soberanía iraquí y defender estrictamente sus intereses nacionales y los derechos de todos los iraquíes". En este sentido, ha incidido en que reforzará "la estabilidad económica (...) de norte a sur y de este a oeste".
"El Ministerio reitera su firme compromiso con la gestión de los recursos petroleros de acuerdo con el principio de soberanía nacional y el interés supremo del país, garantizando una distribución justa de la riqueza entre todos los iraquíes", ha añadido la cartera en un comunicado.
Por su parte, el primer ministro de la región autónoma del Kurdistán iraquí, Masrur Barzani, ha celebrado la rúbrica tras los "incansables esfuerzos y meses de negociación por parte de equipos de todas las partes", felicitando "especialmente al resiliente pueblo del Kurdistán, por superar un importante obstáculo para garantizar sus legítimos derechos financieros en este día histórico".
"Con este paso, el petróleo de los yacimientos de la Región del Kurdistán volverá a entrar en el mercado global", ha destacado en su cuenta en la red social X, donde ha declarado también que, "con la reanudación de las exportaciones, estamos decididos a implementar todos los derechos constitucionales del Kurdistán".
El acuerdo habría sido "facilitado por Estados Unidos", según ha asegurado su secretario de Estado, Marco Rubio, a través de la misma plataforma. "Celebramos el anuncio", ha afirmado acerca de un compromiso que, según él, "traerá beneficios tangibles tanto para estadounidenses como para iraquíes, a la vez que reafirma la soberanía de Irak".
La firma ha llegado tras varios meses de tensiones en torno al movimiento de crudo en el Estado iraquí, después de que el pasado agosto las autoridades de Bagdad tacharan de "infundadas" las acusaciones desde Washington acerca de su supuesta participación en operaciones de contrabando de petróleo iraní para eludir las sanciones impuestas por Estados Unidos contra Teherán.
Semanas antes de esto, el propio Rubio había pedido al primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, que su Gobierno responsabilizase a los autores de los atentados contra campos petrolíferos del Kurdistán, cuyas autoridades habían atribuido a milicias proiraníes.
Washington ha tratado repetidamente de constreñir la influencia de Teherán en Irak mediante múltiples medidas. La última tuvo lugar la semana pasada, cuando el Departamento de Estado anunció la designación como organizaciones terroristas extranjeras de cuatro milicias iraquíes "alineadas con Irán", acusando a Teherán de dar apoyo a estas formaciones para "llevar a cabo ataques" en el país vecino.