MADRID 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los 16 integrantes del nuevo Gobierno cuatripartito de Rumanía han jurado sus respectivos cargos en la noche de este lunes después de que el Parlamento les haya otorgado su confianza con 301 votos a favor y sólo nueve en contra tras lograr un acuerdo centrado en reducir el mayor déficit presupuestario de la Unión Europea.
"Un período de inestabilidad y liderazgo interino de las principales instituciones de Rumanía llega a su fin (...). Haremos todo lo posible para recuperar la confianza de los rumanos. Que Dios proteja a todos los rumanos", ha afirmado el nuevo primer ministro, Ilie Bolojan, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias rumana Mediafax.
El jefe del Ejecutivo ha pronunciado estas palabras tras jurar el cargo ante el presidente del país, Nicusor Dan, quien ha celebrado el comienzo de "un nuevo capítulo". "Todos nosotros, como sociedad, debemos mirar hacia el futuro, e invito a los partidos mayoritarios a actuar en consecuencia", ha asegurado, al tiempo que se ha mostrado "muy optimista" con las medidas financieras del nuevo Gobierno.
"Más allá de la economía, debemos reformar el Estado (...) y debemos recuperar la confianza de los ciudadanos en las autoridades estatales rumanas", ha añadido Nicusor Dan, subrayando que "es un largo camino".
El nuevo Gobierno de Rumanía está formado por socialdemócratas (PSD), con seis carteras; liberales (PNL) y conservadores (USR), con cuatro en ambos casos, y representantes de la minoría húngara (UDMR), que ostentarán dos ministerios. Además, socialdemócratas y liberales se alternarán el puesto de primer ministro con Bolojan (PNL) como líder hasta abril de 2027, tras lo que el PSD ostentará el cargo hasta el final del período legislativo en diciembre de 2028.
La investidura y la jura de cargos han tenido lugar el mismo día en que las principales formaciones del país han logrado un acuerdo de gobierno tras meses de crisis política, que ha incluido la repetición de las elecciones presidenciales.
El acuerdo, basado en un ambicioso plan de recortes, incluirá medidas fiscales como un aumento del IVA sobre productos con tasas bajas, así como de otros impuestos especiales, el gravamen a las pensiones más altas, una reducción del gasto, además de despidos y la limitación de salarios en la administración pública.
Rumanía, que es miembro de la Unión Europea (UE) desde 2007, acumuló un déficit presupuestario total del 9 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) bajo gobiernos anteriores, muy por encima de los límites de la UE. Como consecuencia, Bruselas ha amenazado con congelar sus subvenciones y ha fijado al nuevo Gobierno un plazo de cuatro meses para llevar a cabo reformas, según ha señalado la agencia de nocitias dpa.
Con este nuevo Ejecutivo se espera poner fin a la mayor crisis política de la historia reciente de Rumanía, que se aceleró después del triunfo contra todo pronóstico de Calin Georgescu, ultraderechista afín a Moscú, en la primera vuelta de unas presidenciales que finalmente fueron anuladas por financiación irregular de su campaña, además bajo acusaciones, aunque no probadas, de injerencia extranjera.
Aquellas elecciones fueron reprogramadas para el pasado mayo, cuando el alcalde de Bucarest, Nicusor Dan, se impuso al candidato de la ultraderecha, George Simion, una vez Georgescu había sido inhabilitado.